En un mundo cada vez más influenciado por la tecnología, con mayores conflictos sociales, más competido y a su vez con menores condiciones de equidad, estamos obligados a saber negociar y alcanzar acuerdos satisfactorios para todas las partes.
Ciertamente hay personas que tienen como un Don especial para obtener lo mejor de las negociaciones; sin embargo, estas personas solo tienen estrategias internas adecuadas para dar mayor importancia a la persona y subordinar a los conflictos; cuando uno aprende a implicarse adecuadamente en cada situación, se obtienen beneficios inmediatos de cooperación y flexibilidad de todas las partes.